Es el segundo temblor en el año para Croacia y ha provocado grandes daños como derrumbes de techos, fachadas e incluso edificios enteros.
Este 29 de diciembre se ha registrado un terremoto de magnitud 6.4 grados en la escala de Richter según los reportes del Centro Sismológico Euromediterráneo, azotando a Croacia y afectando a por lo menos otros 12 países.
El temblor tuvo lugar en Petrinja a una profundidad de 10 km y se sintió con fuerza también a unos 50 km del epicentro, en la capital de Zagreb, donde la gente asustada salió a las calles.
El siniestro ocurrió a las 12:19 hora local y fue notable en la región de Zagreb, donde la gente salió a la calle. Movidas por el pánico, varias personas han intentado abandonar la capital, lo que ha generado atascos en las salidas.
El terremoto, que fue seguido de dos réplicas de magnitud superior a cuatro, se sintió en todo el país y en otros 11 de los Balcanes y Centroeuropa (llegó hasta Viena), según la agencia oficial croata Hina.
La vecina Eslovenia ha cerrado de manera preventiva su única planta nuclear por este motivo. Un día antes, la misma zona había sufrido un sismo de magnitud 5 que no causó víctimas ni grandes daños.