A partir de las 10 de la noche y hasta las 5 de la madrugada todos deberán estar en casa.
Ante la propagación del COVID-19, el gobierno de California ha decidido aplicar una de las medidas de restricción más drásticas: el toque de queda.
El gobernador Gavin Newsom informó que esta contención entrará en vigor a partir del próximo sábado 21 de noviembre y permanecerá vigente hasta el 21 de diciembre, de las 10 de la noche a las 5 de la madrugada.
“El virus se está propagando a un ritmo que no habíamos visto desde el inicio de esta pandemia, y los próximos días y semanas serán críticos para detener el aumento. Estamos activando la alarma. Es crucial que actuemos para disminuir la transmisión y retrasar las hospitalizaciones antes de que aumente el número de muertes. Ya lo hemos hecho antes y debemos hacerlo de nuevo”, dijo Newsom en un comunicado.
La orden será emitida en los condados más afectados, es decir, los que estén en el nivel púrpura, lo que representa al 94% de la población del estado, incluyendo Los Ángeles y San Diego.