La mandataria descartó la versión en redes sociales sobre una posible privatización de la vialidad.
El bulevar 2000 de Tijuana no será privatizado y seguirá siendo gratuito para los automovilistas, pero se añadirán carriles confinados de pago para quienes quieran ahorrar tiempo en los 12 kilómetros de vialidad hasta el bulevar Alberto Limón Padilla, así lo indicó la gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila, ante los rumores de la supuesta privatización de la obra.
La mandataria estatal descartó las versiones de algunas páginas en redes sociales y explicó que los cuatro carriles existentes serán los libres y en el camellón que se encuentra entre ambos se harán carriles confinados de peaje. La diferencia es que los carriles de paga no deberán tener ninguna interrupción.
Autoridades dieron a conocer algunos detalles del proyecto con la presencia de tres casetas con entradas y salidas de los carriles confinados, así como un par de puentes o retornos a la altura del Altiplano y El Florido.
La inversión de esta obra se encuentra entre los mil y mil 200 millones de pesos, los cuales serán con participación privada; en ese presupuesto se incluyen la rehabilitación de los carriles existentes con pavimento hidráulico.
Se espera que la obra pueda comenzar en verano tras elegir a la empresa ganadora de la licitación, la cual de acuerdo con las normas estatales tendría una concesión de 30 años de la vialidad.
