Uno de los propósitos es despertar la indignación social.
Aunque la marcha del Día de la Mujer este 8 de marzo (8M) tuvo el objetivo de concientizar, para ciertas personas resultó incomprensible la destrucción de infraestructura y algunos actos incluso fueron catalogados como vandalismo.
En distintas ciudades de México las autoridades reportaron daños en la vía pública, por ejemplo en Tijuana, uno de los edificios de la Fiscalía General del Estado resultó con ventanas rotas y al menos 10 vehículos dañados.
En Monterrey, la protesta del 8 de marzo, dejó al menos cuatro establecimientos afectados. En la Ciudad de México, derivado de los altercados de la marcha, resultaron 62 policías y 19 civiles lesionados.
¿Qué significan estos actos?
Ante los cuestionamientos de algunos sectores de la sociedad sobre las formas en las que se han llevado a cabo las manifestaciones, distintos grupos feministas dieron a conocer que la destrucción de los monumentos, edificios o cualquier otro objeto significan el hartazgo ante los casos de abuso contra las mujeres.
El propósito es concientizar entre la población, despertar la indignación social porque si te molesta que se destruya un edificio o se pinte un monumento debes preguntarte por qué no me causa la misma irritación cuando se acosa a una mujer o cuando se denigra al sector femenino y no hay consecuencias al respecto.
Además de los 67 feminicidios registrados en enero del 2021 en todo el país, existen homicidios a mujeres que si bien, a consideración de las fiscalías estatales, no fueron tipificados como feminicidios, también representan un parte de la violencia letal contra la mujer que se perpetra día con día.
De acuerdo al informe de violencia contra la mujer elaborado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), en México, aparte de los asesinatos a mujeres por cuestiones de género que se investigan como feminicidios, se abrieron 240 carpetas por presuntos homicidios donde las víctimas fueron mujeres.